Dificultad: Fácil.
Uno de los juegos más sencillos y originales a los que recurrir para variar un poco vuestra rutina picante es el emplear prendas comestibles. Se pueden encontrar multitud de modelos diferentes en cualquier Sex Shop y a precios que por lo general no suelen ser demasiado caros, sobre todo teniendo en cuenta que estas prendas van a ser de un solo uso.
La variedad de productos que podemos encontrar es amplia: desde sujetadores o tangas de caramelitos a prendas íntimas de múltiples sabores pasando por pinturas corporales comestibles (en caso de que prefiráis dibujaros vuestra propia ropa interior).
En este enlace podréis encontrar algunos de estos productos y podréis comprarlo con descuento si estáis dados de alta en nuestro foro.