Dificultad: Difícil.
Mucho mejor que regalar una fotografía, o por lo menos mucho más íntimo y personal, es regalar un retrato a mano. Por desgracia no todo el mundo posee el talento necesario para realizar un retrato de una persona querida, pero el buen romántico nunca se queda de brazos ante la adversidad :) ¿Qué opciones tenemos?
La primera opción es la más evidente: casi todos conocemos a alguien que ha estudiado bellas artes o que tiene muy buena mano para pintar. ¿Por qué no pedir a este dibujante amigo que nos eche una mano?.
La segunda opción es la más cara: encontrar un dibujante profesional que nos haga un retrato a partir de una foto que le llevemos. Por suerte el precio de un retrato no es caro. En muchas ciudades hay dibujantes que trabajan en la calle retratando a los viandantes por un módico precio...
La tercera y última opción es la artesanal: con la ayuda de un programa como Photoshop tendréis que aplicar un filtro a la foto de forma que queden dibujados sus trazos más importantes. El resultado será como si la foto se hubiera dibujado con un lápiz.. Imprimid este "retrato" y emplead papel de cebolla para calcar los trazos. Así obtendréis el deseado retrato a mano :).